En CBC, con nuestra decidida apuesta por la sostenibilidad, hemos calculado nuestra huella de carbono y ya estamos implementando acciones para reducirla.
Lo acredita oficialmente nuestra inscripción en el Registro de Huella de Carbono, Compensación y Proyectos de Absorción de Dióxido de Carbono.
Todos dejamos una huella de carbono (CO2) en el planeta, consecuencia de nuestro consumo y nuestros hábitos diarios. También todas las empresas, consecuencia de su actividad, emiten gases de efecto invernadero de forma directa o indirecta.
La Unión Europea tiene un compromiso activo para la reducción de las emisiones de efecto invernadero. En España, para fomentar esta reducción se creó el “Registro de huella, compensación y proyectos de absorción de CO2”, que recoge los esfuerzos de las empresas para el cálculo y reducción de sus emisiones de gases de efecto invernadero. A la vez, este registro les facilita compensar toda o parte de estas emisiones con su participación en proyectos forestales.
Cuando pensamos en la huella de carbono de una empresa, no tenemos que pensar únicamente en chimeneas humeantes o vehículos contaminantes. El cálculo de la huella de carbono incluye consumo eléctrico en los diferentes centros de trabajo (oficinas y obras en nuestro caso), tipo de vehículos de los que dispone la empresa, forma de desplazamiento de los trabajadores entre los diferentes centros de trabajo, sistema de climatización, …
Mira este video resumen, y si quieres sigue el siguiente enlace oficial del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, donde puedes obtener una información más detallada.